miércoles, 6 de mayo de 2009

El crecimiento por medio de la comunidad

Medios para crecer en la comunidad

Amándose hasta el fin. Juan 13.1 y 1 Corintios 13.1-10

Siendo sinceros y transparentes. Juan 13.37-38. Jesús fue sincero y ubicó a Pedro.

Comunicándose. Jesús habló los 5 capítulos, pero no fue un monólogo.

Barreras a la comunidad. Las formas esenciales de maldad en las relaciones personales.

El asalto. “Asaltamos a la otra persona cuando actuamos de manera contraria a lo que es bueno para ella, aún cuando lo hagamos con su consentimiento” D. Willard.

El retraimiento. “Nos retraemos o distanciamos de alguien cuando consideramos su bienestar y prosperidad integral como cuestiones que nos dejan indiferentes, o quizás llegamos hasta despreciar. Nos trae sin cuidado. D. Willard.

No entender al otro o a los otros. Pedro no entendía porque Jesús le quería lavar los pies y mucho menos por qué no le lavaba las manos y la cabeza. Juan 13.6-10.

La traición. Juan 13.21-22. Jesús sabe que Judas lo va a traicionar y se angustia profundamente, el grupo pierde la confianza y comienzan a dudar unos de otros.

Pasos para sobrepasar las barreras al crecimiento en comunidad.

Reconocer que no estoy solo. Juan 16.32 Sin embargo, solo no estoy, porque el Padre está conmigo. Salmo 27.10 NVI: Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos. RV: Aunque mi padre y mi madre me dejaran, con todo, Jehová me recogerá.

Apoyarme en los “ángeles de carne y hueso” que Dios ha puesto cerca de mí. Juan 17.11

Buscar intencionadamente gente que me ayude a crecer. Jesús escogió con quien andar 15:16.

La mentoría, el grupo pequeño y la consejería no son accesorios.

Beneficios del crecimiento en comunidad.

Nos volvemos más como Dios.

Aprendemos a llevarnos bien. Nos entrenamos para la eternidad.

Otras personas se enteran de que hay un Dios que los ama.

En comunidad se experimenta a Dios de forma única.

El cristianismo es una relación de personas con Dios y entre ellas, no el esfuerzo de uno o una sola. Dios no escogió a un hombre para que siguiera su obra. Escogió a un equipo. Escogió el milagro de la comunidad.

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